1- RECONOCER
EMOCIONES
Mostramos la
imagen de un niño y pedimos a los alumnos que digan cómo se siente el niño de
la imagen, después la señalamos en nuestro “Mural de las emociones”. Así los
niños más pequeños se familiarizan con todas las emociones y aprenden a
identificarlas en los compañeros.
2- EL SACO
DE LAS EMOCIONES
Metemos
todas las caras de expresiones del “Mural de las emociones” en una bolsa. Nos
sentamos todos en círculo y pedimos que un alumno saque una, sin que nadie la
vea, solo él. A continuación volverá a meterla en la bolsa y con gestos,
sonidos, movimientos, etc. representará la emoción.
El resto de
alumnos podrán levantar la mano y decir qué emoción estaba representando.
Después explicarán cómo han adivinado la emoción, y en qué gestos se han
fijado. Por ejemplo: sé que está triste porque llora, mira hacia abajo; sé que
está contento porque salta de alegría, sonríe; sé que está enfadado porque
tiene los puños cerrados, frunce el ceño, etc.